la misma que fue tuya hasta los huesos,
la perdiste, la dejaste, la abandonaste a sus lágrimas,
con aquel verbo dominado con fuerza por tí.
Y ahora......, que ya te olvidó, 
que no se acuerda día a día de tí, 
te apareces, 
te cruzas entre ella y ese incipiente nuevo amor 
con el que ella sueña cada noche.
Aquella mujer, ya no está, 
murió el día que partiste arrepentido de tus dichos.
%%%%%%%%%%%%%%%%
No hay comentarios:
Publicar un comentario